¿Cuál es el origen de los bombones de chocolate?

«La vida es como una caja de bombones: nunca sabes lo que te va a tocar». La icónica frase de Forrest Gump forma parte del imaginario colectivo, y también estos dulces de chocolate son un indispensable en cualquier pastelería y confitería. Hoy la demanda de caja de bombones de chocolate online a domicilio vive un momento dulce, y no son pocos los consumidores que se deleitan con esta exquisitez sin esperar a San Valentín.

La Real Academia Española define bombón como una «pieza pequeña de chocolate, que en su interior puede contener licor, crema u otro relleno», y reconoce su origen etimológico en la palabra francesa bon. De todas las teorías, la que sitúa la creación de estas delicias de chocolate en la Francia del siglo XVIII es la más probable.

Para sorprender al rey Luis XIV, su pastelero le preparó un bocado de frutas bañadas en chocolate. Cuando el apodado Rey Sol lo probó, manifestó su juicio favorable con la frase bon, bon («bueno, bueno» en lengua francesa). La respuesta debió correr como la pólvora, pues en adelante todos los chocolates provistos de relleno fueron conocidos como ‘bombones’.

En siglos posteriores, los maestros chocolateros de Italia, Bélgica, Suiza y la misma patria de Luis XIV dieron impulso al desarrollo de la fórmula de los bombones. Hoy las variedades de estos manjares se cuentan por cientos, y como curiosidad cabe destacar que el bombón más caro supera los tres mil euros: Glorius, del chef luso Daniel M. Gomes.

En cambio, la primera caja de bombones tardaría algo más en llegar a las pastelerías. A mediados del siglo XIX, el emprendedor inglés Richard Cadbury lanzó la primera de estas cajas, con un diseño acorazonado además, para la marca chocolatera que llevaba su apellido. Dos décadas antes de que Cadbury lanzara su caja de bombones con forma de corazón, el Día de San Valentín se consolidaba como festividad comercial.