Las empresas de venta de madera en Galicia no se limitan a comprar la madera de los árboles listos para ser cortados. También realizan otro tipo de negocios en relación con los propietarios de las parcelas de monte. Estos negocios están encaminados a que ambas partes puedan sacar provecho y se sientan cómodas con el trabajo conjunto.
Por ejemplo, algunos propietarios de montes ni siquiera viven en la zona en la que están los árboles. Y se encuentran con que tienen la obligación de realizar limpiezas del monte todos los años o de tener que llevar a cabo otras gestiones en relación con los mismos. Las industrias madereras pueden alquilar esos montes por una cantidad al año y, a cambio, se llevan la madera una vez que esté lista para cortar. Para los que ven esa madera como una inversión, este contrato también se puede hacer cobrando una vez que se corte la madera. Para las empresas, supone un ahorro en el precio final y para quienes venden, olvidarse de problemas y limitarse a cobrar las ganancias. Como hemos dicho, ambas partes ganan en el acuerdo.
Pero también hay quienes están cansados de tener parcelas que se van dividiendo cada vez entre más y más propietarios y quieren poner fin al tema. Parcelas grandes que pertenecieron a los abuelos se dividieron primero entre sus hijos y luego entre los hijos de estos. Y cada vez es menos lo que se gana y encima siempre hay problemas para poder firmar los contratos. En estos casos, lo mejor es vender y olvidarse de cualquier problema que pueda haber. Se reparte el dinero de la venta y nos olvidamos de estar con gestiones, papeleos y nuevos repartos en cada generación.
Aquí, las madereras también pueden ayudar, porque funcionan en algunos casos como inmobiliarias pero especializadas en este sector. Se encargan de buscar un comprador para las parcelas y que todo se realice legalmente, pudiendo dejar eso atrás y olvidarse de papeleos que daban más problemas que ganancias. Por otro lado, si tu caso es el contrario y buscas comprar porque quieres tener tu dinero invertido en madera, puedes ser la otra parte y buscar a través de estas empresas madereras las parcelas perfectas para tu inversión, pudiendo producir madera que les venderás más adelante. Nuevamente, todas las partes ganan, por lo que los acuerdos son buenos.