Todo el mundo busca hacer compras lo más baratas posibles y para ello se utilizan los vales y cupones que se ofrecen con algunos productos, eso siempre les han gustado a los consumidores que hacen casi cualquier cosa para conseguir cosas gratis.
La gente compra sin parar, incluso si no lo necesitan, estamos completamente condenados en una sociedad consumista que nos impulsa en todo momento a querer comprar más y más cosas sin parar. Mucha de la culpa de esto es que los productos ya no tienen la calidad de los que había hace unos años, los productos de hoy en día ya no son tan duraderos ni de la calidad esperada, así te obligan a comprar otros productos iguales a los que ya tenías pero que te ya sabes que no te van a durar mucho. Antes, haces unos cuantos años,cuando te comprabas algo era algo que podías estar seguro que te iba a durar durante unos cuantos años sin tener que preocuparte por cuánto te iba a durar, hoy en día cuando compras algo sabes que no te va a durar mucho.
Sobre todo en las épocas de las rebajas son las épocas en que la mayoría de la gente va a comprar con más avidez ya que esperan encontrar los productos más baratos, muchos de esos productos ni siquiera sabían que los necesitaban o que los querían hasta que están en la tienda a punto de comprarlos. Yo soy de la opinión de que cuando se va a comprar algo específico hay que ir a tiro fijo a comprar eso y no pararse a ver cualquier cosa que llame tu atención, que es realmente lo que intentan las tiendas, que te entre todo por los ojos y no puedas resistirte.
Sólo si vas preparado para conseguir que no te influyan las ofertas y los vistosos colores de los carteles de los productos conseguirás evadirte de la sensación de querer comprarlo todo, la cuestión es que muy poca gente tiene la facilidad de que no se dejen influir por las ofertas que a todo el mundo atraen tanto.