El municipio de O Grove, sito en la península del mismo nombre, es uno de los destinos marineros más turísticos de las Rías Baixas. Su mezcla de naturaleza, arquitectura medieval y actividades al aire libre convierten a esta localidad en una parada obligada para cualquier viajero. Gracias a su ubicación privilegiada, los visitantes suelen aprovechar para ir a las cies desde o grove o explorar otros destinos isleños en sus alrededores, como La Toja, Arosa o el Parque Nacional de las Islas Atlánticas.
De todos los enclaves de interés en O Grove, la Ermita de Nuestra Señora de La Lanzada destaca por su historicidad e interés cultural. Su arquitectura data del siglo XII o XIII y está consagrada a una virgen ligada a la fecundidad (dice una leyenda local que las mujeres que se arrojen al mar desde este punto recibirán nueve olas ‘fecundas’ que las ayudarán a quedarse en cinta). Especial mención merece la Torre de Escuredo, obra de estilo modernista erigida en 1922 por una familia catalana.
Galicia es sinónimo de calas y playas de gran atractivo, y O Grove no se queda atrás. La playa de La Lanzada es un arenal de 2 kilómetros de longitud, famosa en las Rías Baixas por sus dunas elevadas y las aguas cristalinas del Atlántico que bañan sus orillas. La práctica de surf y otros deportes acuáticos es una experiencia gratificante en La Lanzada.
Los entusiastas del trecking disponen de una razón de peso para visitar O Grove: el paseo o sendero de las Pedras Negras, una travesía de 2,5 kilómetros que transcurre entre el puerto deportivo de Pedras Negras y las formaciones rocosas de O Con Negro. Entre estos extremos discurren parajes de singular belleza.
Por su parte, el Mirador de Siradella ofrece una panorámica de O Grove. Alzándose 167 metros sobre el nivel del mar, este promontorio natural invita a relajarse, tomar una fotografía de recuerdo o simplemente deleitarse con la majestuosidad de las vistas.