En el supermercado el otro día me fijé en que vendían una marca de arroz en el que diferenciaban arroces para diferentes comidas, y me da la impresión de que nos están tomando el pelo. Creo que nos están intentando vender el mismo arroz con diferente envase para poder venderlo como si fuese para otros usos diferentes. El que más me llamó la atención fue el arroz especial para los postres, como si se hiciesen tantos postres con arroz. Personalmente solo conozco el arroz con leche desnatada, no conozco ningún otro postre en el que se pueda utilizar el arroz. Si tengo esta sospecha con el arroz, porque no tenerla con otros productos que nos están intentando colar por otros completamente diferentes.
Las tácticas de venta de los productos entiendo que vaya evolucionando con los años, pero con lo que no podemos conformarnos es que nos tomen el pelo con los productos que compramos para comer. Los productos que se ofertan tienen que ser exactamente lo que ponen en las etiquetas, no como pasa con muchos productos. En los estados unidos el otro día vi una noticia que decía que estaban vendiendo en sus supermercados botellas de aceite de oliva virgen español y de aceite de oliva tenía bastante menos de la mitad. En la etiqueta ponía que tenía el veinte por ciento de aceite de oliva, que al parecer es lo mínimo que tiene que tener en ese país para poder venderlo como aceite de oliva virgen. El día que los americanos prueben un aceite virgen extra cien por cien, no se lo podrán creer y se darán cuenta de que les están tomando el pelo. Por el bien de todos nosotros espero que esto no esté pasando en nuestro país y nos estén tomando el pelo como a los americanos.
Por mucho que nos digan qué tenemos que leer bien las etiquetas de los productos que compramos, si nos engañan con lo que meten dentro no nos sirve de nada tener que leerlas. Personalmente ya solo compraré en el futuro aquello de lo que esté seguro que contiene.