4 actividades divertidas en vacaciones en las Rías Baixas

¿Te vas de vacaciones a las Rías Baixas? Pues, tal vez, no necesites ningún consejo porque lo pasarás bien seguro. Son tantas las cosas que puedes hacer que no te aburrirás ni un momento e incluso si optas por no hacer nada y tirarte en la arena a disfrutar del sol y del mar, también será una excelente elección. Pero por si quieres que te ayudemos, te damos algunas ideas de actividades divertidas para vacaciones en las Rías Baixas.

  1. Busca la mejor bodega de albariño para visitar. ¿Cuál es la mejor bodega? Pues en cada sitio te van a decir que la suya, las más cercana o con la que más se identifiquen. Da igual, lo bonito va a ser visitar una bodega, ver donde se guarda el vino y aprender alguna cosilla sobre el proceso del mismo. Lo mejor, probarlo al final ya que estas visitas suelen venir con una pequeña cata. Por último, no olvides comprar alguna botella para disfrutarla en casa, ya con toda la tranquilidad.
  2. Haz una excursión en barco a alguna de las islas, como Cíes o como Ons. Puedes pasar todo el día en las islas, paseando por sus lugares naturales y tomando el sol en las playas. Te sentirás como si te hubieras perdido en el paraíso. Así que no olvides poner una alarma porque no puedes perder el barco para volver a tierra. Y es que todo lo bueno tiene un final, a no ser que tengas una reserva en el camping y puedas disfrutar de una noche mágica.
  3. Los feirones de Portugal, a tiro de piedra. Uno de los más famosos es el de Valença, que tiene como característica principal estar al lado de A Fortaleza, una pequeña ciudad amurallada, antigua fortaleza, en la que hay multitud de tiendas para comprar todo tipo de textiles. El mercado se celebra todos los sábados y es una experiencia muy divertida. No hay nada diferente a los mercadillos típicos, pero las dimensiones son bastante mayores.
  4. Bucea. Aunque el agua del océano Atlántico puede no ser la mejor para bucear porque es fría y puede estar algo revuelta, la experiencia va a valer la pena. Puedes hacer un curso de iniciación que acabe con un bautismo de buceo que te permita sumergirte un rato y vivir la experiencia, o ir un poco más allá y obtener el título.