4 razones para no ir a las Islas Cíes

  1. Demasiada naturaleza. Eres un animal del cemento. Necesitas sentir su dureza y el calor que desprende en verano bajo tus pies. Caminar sobre tierra suele resultar una carga de energía para cualquiera. Poder pisar el campo con los pies desnudos, o la arena, supone para la mayoría de los humanos una experiencia grata que te pone en contacto con la naturaleza y que parece que te renueva. Pero eso no es así para los seres de ciudad que necesitan cemento y asfalto para poder caminar. No vas a encontrar demasiado ni de lo uno ni de lo otro en las Islas Cíes, esa es la verdad.
  2. Todo el mundo sabe que el agua está muy fría. Lo dice todo el mundo y tiene que ser verdad. Así que el hecho de que la playa sea enorme, la arena sea dorada como la de las mejores postales de turismo y el agua resulte cristalina y transparente, ya no importa. Solo cuenta que el agua está fría. Como si en el resto de las playas atlánticas estuviera a cuarenta grados. Si este único handicap de las Cíes es suficiente para desanimarte a la hora de conocerlas, es evidente que no son el lugar indicado para ti.
  3. No hay demasiados bares. Eres de esas personas que por estar al aire libre entienden el sentarse en terraza tras terraza toda la tarde y claro, en las Cíes la oferta de hostelería es limitada. Así que, ¿qué aliciente tiene para ti la isla? ¿El sentarse en la playa y disfrutar de la brisa marina y del sonido de un mar cristalino? ¿El caminar por sus rutas de senderismo y sentarte a disfrutar de tu bebida en un paraje único? Evidentemente, nada de eso es comparable con una cañita fresca tomada justo al borde de una carretera por la que pasan mil coches por segundo soltando ese maravilloso humo por su tubo de escape.

4. No puedo ir en coche. Si eres de esas personas que, como se dice coloquialmente, se lleva el coche al baño… las Cíes no son para ti. Porque no están comunicadas con tierra por carretera. Para acudir a la isla tendrás que comprar tus billetes cies mar de ons y subirte al barco, una gran experiencia para la mayoría, pero agobiante para los que solo saben desplazarse sobre cuatro ruedas. Así que mejor, no acudas.